En declaraciones a los medios antes de intervenir en una mesa redonda junto a varios de sus colegas en el Encuentro Bancario Iberoamericano, Álvarez no quiso pronunciarse sobre las demandas que interpondrán, previsiblemente, los accionistas del Banco Popular tras perder la totalidad de su inversión.
En cuanto a la posible responsabilidad del Santander como comprador del Popular en este asunto y ante los accionistas explicó que no entiende mucho de estos temas, pero aclaró que fue la Autoridad Europea de Resolución la que tomó las resoluciones «que quiso tomar». «Nosotros hemos sido compradores del banco en unas determinadas condiciones que estableció» la citada autoridad europea, añadió.
En cuanto a la continuidad de la plantilla del Popular, dejó claro que «son unos magníficos profesionales» y «siguen teniendo que atender a los cuatro millones de clientes» que tienen, porque «durante un tiempo la integración operativa no estará completada».
La integración del Popular tendrá un impacto «muy pequeño» en las cuentas del segundo trimestre del Santander, pues la operación se produjo «después de la intervención de las autoridades europeas».
El consejero delegado del Santander no quiso responder a la pregunta de si el expresidente del Popular Ángel Ron cobrará o no su pensión. Poco después, durante su intervención, al ser preguntado por el moderador, insistió en que «conseguir la estabilidad era lo importante y se ha conseguido».
También se felicitó por el buen funcionamiento del mecanismo europeo de resolución, que nunca antes se había testado, y alabó la rapidez del proceso, que se completó en una noche, desde que el Santander fue invitado a participar.
Source: ABC