Esta evolución de la balanza de pagos por cuenta corriente (que mide las transacciones de bienes, servicios, rentas y transferencias de España con el exterior) se explica por el aumento del superávit de la balanza de turismo y viajes, que pasó de 5.800 a 6.100 millones de euros.
Asimismo, contribuyó el menor déficit de las rentas primaria y secundaria (rentas del trabajo, de la inversión, impuestos, cotizaciones, prestaciones sociales y trasferencias corrientes) que se redujo de 4.800 a 2.200 millones de euros.
El superávit por cuenta corriente sumado al saldo positivo de la cuenta de capital (otros 200 millones) dio como resultado una capacidad de financiación de la economía española acumulada hasta marzo de 1.900 millones, frente a la necesidad de 600 millones del mismo periodo de 2016.
El saldo neto de la cuenta financiera -excluyendo el Banco de España- hasta marzo fue de 43.200 millones, debido a la contribución positiva de la inversión de cartera en 30.100 millones, el doble que un año antes.
La inversión directa, por su parte, contribuyó con 600 millones al saldo total, cuando un año antes lo hacía con 6.400 millones; en tanto que otras inversiones, entre las que se incluyen préstamos, repos y depósitos, aportaron 14.100 millones, mientras que un año antes restaban 18.700 millones.
Source: ABC